Besos con sabor a aceituna y pepinillos
Besos con sabor a patatas
que se escurren por la comisura de los labios
Besos secos
Besos que danzan por el rostro
Besos húmedos de caracol
Besos que no se apagan y encienden las alarmas
Besos con las lenguas apretadas a un centímetro
Besos inflamables
Todos estos eran los besos
que formaban parte del repertorio de Estrella.
Nunca nadie imagino que poseyera tal secreto,
ni siquiera aquellos que martirizaban
el corazón bajo sus faldas.